Hoy todo JUEGAN a lo SEGURO, ya no hay GUERREROS.
Los nuevos tiempos trajeron peleadores formados desde niños en academias de élite. Hijos de campeones, de linajes que ya conquistaron el deporte. Hoy los “prospectos” no se descubren en un gimnasio de barrio, se crían en instalaciones privadas, con rutinas diseñadas desde la infancia para moldear atletas perfectos.










