Bartlett bajo la lupa de EE.UU.: Otro que se suma a la lista de IMPUNIDAD!

🧲 Introducción

Mientras los reflectores mediáticos se enfocan en Claudia Sheinbaum como la heredera “progresista” del obradorismo, detrás del telón se cocina una bomba diplomática: Estados Unidos prepara una acusación formal contra Manuel Bartlett, el operador oscuro del régimen. ¿Sheinbaum ya lo sabe? Sí. ¿Hará algo? No. Porque esto no es una purga, es teatro. El gobierno mexicano no se está desmoronando: está simulando su propia regeneración.

🧩 ¿De qué se acusa a Bartlett?

Según fuentes filtradas en video, EE.UU. estaría preparando cargos contra Manuel Bartlett por corrupción, lavado de dinero y vínculos con redes de poder paralelas. Bartlett, actual titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), ha sido señalado por décadas como símbolo de impunidad: desde el fraude electoral de 1988 hasta contratos opacos en el sexenio de López Obrador.

La acusación no es nueva, pero el timing sí. Se filtra justo cuando Sheinbaum toma el control, lo que sugiere una narrativa de “limpieza institucional”.

🎯 ¿Realmente lo van a procesar? Más que justicia, parece una estrategia de legitimación para el nuevo gobierno. Bartlett es el chivo expiatorio perfecto: viejo, impresentable, y funcionalmente desechable.

🧠 Sheinbaum y la simulación del cambio

El video afirma que Sheinbaum ya fue informada por EE.UU. sobre la investigación. Su silencio no es complicidad, es cálculo. Necesita mostrar “ruptura” con el viejo régimen sin tocar el núcleo del poder.

Bartlett no es un obstáculo, es un sacrificio simbólico. La narrativa oficial será: “No protegemos a nadie”, mientras se preserva el aparato de control.

🧬 ¿Qué revela esto sobre el nuevo gobierno? Que el obradorismo no murió, mutó. Sheinbaum no desmonta el sistema, lo maquilla.

La simulación es total: se finge justicia para consolidar continuidad.

🧨 ¿Por qué EE.UU. interviene ahora?

La presión internacional no es por ética, es por geopolítica. Bartlett representa un modelo energético nacionalista que incomoda a Washington. La acusación busca debilitar ese modelo sin confrontar directamente a Sheinbaum.

Es una jugada quirúrgica: eliminar al operador sin tocar a la figura.

🧠 ¿Es esto una fractura real o una coreografía diplomática? Todo indica que es una negociación encubierta. EE.UU. no quiere desestabilizar, quiere reconfigurar. Y Sheinbaum está dispuesta a jugar.

🧷 Conclusión: El poder como espectáculo

El caso Bartlett será presentado como un acto de justicia histórica. Pero no nos engañemos: es una puesta en escena. El régimen no se purga, se recicla.

🧠 La simulación es el nuevo lenguaje del poder. Y el público, como siempre, es espectador cautivo.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio