Ernesto Vázquez Reyna, delegado de la Fiscalía General de la República (FGR) en Tamaulipas, fue brutalmente asesinado la tarde del sábado 3 de agosto en Reynosa, en un ataque directo con granadas y armas largas frente al hotel Villa Real, donde se hospedaba. El crimen no solo fue planeado y ejecutado con precisión militar, sino que quedó grabado en video, dejando un mensaje claro: en Tamaulipas manda el crimen organizado.

🎥 Un asesinato a plena luz del día
Eran las 3:00 de la tarde cuando un convoy de sicarios interceptó al funcionario federal. El ataque fue fulminante: fusiles de alto calibre y granadas de fragmentación destruyeron la unidad en la que viajaba. Ya herido, el delegado fue rematado en la banqueta, justo frente a la entrada del hotel, en una escena que recuerda más a una ejecución de guerra que a un simple homicidio.
Todo quedó captado en video por ciudadanos que, entre el miedo y la rabia, grabaron los hechos. Las imágenes muestran la crudeza con la que el crimen se desarrolla en el país, y especialmente en zonas como Tamaulipas, donde los grupos delictivos actúan con total impunidad y control territorial.
🧩 ¿Quién era Ernesto Vázquez Reyna?
Vázquez Reyna fue designado por la FGR como delegado en Tamaulipas con la encomienda de investigar delitos federales en una de las regiones más violentas del país. Exfuncionario de la Secretaría de Seguridad Pública y con experiencia en inteligencia criminal, había enfrentado denuncias por presuntos abusos en años anteriores, pero nunca fue removido.
Fuentes extraoficiales apuntan a que investigaba redes de tráfico de armas y vínculos de funcionarios locales con el crimen organizado. Su ejecución podría estar relacionada con estos temas.
⚠️ Tamaulipas: territorio sin ley
El asesinato del delegado ocurre en un contexto de violencia extrema y colusión institucional. La zona fronteriza ha sido, durante años, un campo de batalla entre el Cártel del Golfo, el Cártel del Noreste y diversas facciones locales. Pero más allá del conflicto entre bandas, el verdadero problema parece ser el grado de infiltración del crimen en las estructuras del Estado.
El uso de armamento militar, la precisión del ataque y la seguridad con la que actuaron los sicarios revelan algo preocupante: los cárteles ya no temen a las instituciones. Por el contrario, parecen tenerlas bajo vigilancia, sabiendo quién se mueve, cuándo y cómo.
🎭 El espectáculo de la impunidad
Este asesinato se suma a una larga lista de crímenes de alto perfil que han quedado sin responsables ni consecuencias reales. La pregunta obligada es:
👉 ¿Quién mandó matar a Vázquez Reyna?
👉 ¿Qué sabía? ¿A quién incomodaba?
Y más importante aún:
👉 ¿Qué dice esto sobre el estado real del poder en México?
No se trata de un caso aislado, sino de un patrón que se repite en distintas regiones del país, donde los representantes del Estado son eliminados como piezas incómodas dentro de un juego más grande, más oscuro y más estructurado de lo que se admite públicamente.
🧠 En Desorden Mundial…
Seguiremos investigando los actores detrás de este crimen, las redes que lo sostienen y el modo en que el narco-Estado se disfraza de república democrática mientras sus piezas se ejecutan a plena luz del día.
Porque este no fue solo un asesinato. Fue un mensaje.